Capuchina
Nacido en un lote de
residuos amargos
Trabajaste hasta la
luz,
Agrupando la fuerza
que tenías
Y quedándote fuera de
vista
A través de un
agujero de nudo por fin,
Para salir al sol
Como sin un pasado
Terminado con ello,
recomenzado.
Ahora en la cerca del
lado de la calle
Tomás algunas verdes
vueltas,
Se vuelven ágiles en
la indiferencia
Antes de que las
primeras flores se quemen.
De la pobreza la prisión
Y la desnutrición
Un pródigo se ha alzado,
El gasto propio,
nunca gastado.
Concha amarilla
irregular
Y espolón inclinado
detrás
No rara, pero hermosa
- belleza callejera-
a medida que te enroscas
Y saltas, agarre tras
agarre,
Un fugitivo de oro
Todavía corriendo,
esparciendo oro
De lado a lado todo
el día.
Patineta
Cabeza de remolque en
su patineta
hila a través de una
multitud
de pies y caras
retrasadas
hacia a una lenta
estupidez.
Dardos, dobles,
giros.
Te das cuenta de lo
ágilmente
que el cuerpo ha
aprendido
a evaluar la relación
entre la tabla,
los peatones y la
cerca inmediata.
Emblema. Emblema de
la moda.
Vistiendo el blanco
sucio
en el alboroto tan
delicado
como las cortinas que
caen
sobre un santo
renacentista
dandy.
Cadena alrededor de
su cintura.
Una mano enguantada.
El pelo teñido para
mostrar que está teñido,
llama pálida
espigando del combustible.
Cabeza de remolque en
patineta
perfeccionándose :
emblema
extraordinario
de lo ordinario.
En la cara sin sexo
ojos inocentes de
sentimiento
por tanto sugieren el
espíritu.
Fuera del comedor
Fuera de la basura
fuera del comedor
él lame los
diferentes sabores
de papel grasiento
como un perro
y luego a diferencia
de un perro
se come el papel
también.
Los tiempos son
una convivencia
letárgica,
ya que se sientan
alrededor
de un lote de
residuos que pasa por el moscatel
que calienta a cada
uno en su vaina amarga
llevada tanto tiempo
que el olor
es complejo, con
reminiscencias
de la cocción de
alimentos o heces.
En ocasiones esta
la clínica de
desintoxicación, en ocasiones
cuando lo duerme a
través del asiento trasero
de un auto con cuatro
llantas desinfladas,
suela ennegrecida y
talón atascado
contra las ventanas
laterales,
cara barbuda cegada
por el sueño
se volvió hacia la
luz.
Otro yace en el
asiento delantero.
Una mala hierba,
Scraggle no deseado
tufo
Con desagradable
amarillento,
Persiste entre los
adoquines
Al margen de la
rejilla
Barbuda se volvió
hacia la luz.
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